Primer Contacto

Buenas noches, primera prueba superada y además ¡con nota! Os aseguro que vuestros hijos, hermanos, amigos...son unos campeones en valentía y en saber estar.

Llegamos a Toulouse sobre las 14.00 y nos "aparcamos" en un parque para comer los bocatas. La conciencia de que verdaderamente estábamos en Francia cada vez era más manifiesta y ya me preguntaban..¿pero tú no te vas, no? ¿vas a estar por aquí? y progresivamente iba aumentando el número de preguntas por minuto tales como: ¿cómo se dice "encantada de conocerte"? ¿qué le digo si quiero tal cosa o la otra? La pregunta por excelencia: ¿Cómo le digo que me dé la clave del wifi? 

Ese era su primer objetivo al quedarse solos, no perder el contacto con los suyos. 

A las cinco de la tarde llegamos al instituto. No tiene precio ver sus caritas de emoción y nervios. Y los chicos franceses, las profesoras y los padres esperándonos. Nos recibieron en el enorme comedor donde el director les dio la bienvenida en español ,y después en francés, y a continuación, la profesora de español iba nombrando de uno en uno a los alumnos españoles y a sus parejas francesas y se acercaban para saludarse, después se sentaban juntos y finalmente nos ofrecieron una merienda y así tuvieron ocasión de hablar un poquito en grupo, mientras los padres se iban acercando y me decían que todo iba a ir bien y los planes que tenían para el fin de semana. 

Mis compañeras profesoras decían que los míos parecían pollitos detrás mía. De hecho, nada mas irse me estaban escribiendo whatsapps contándome lo que estaban haciendo. Han salido a dar un paseo, han visto la tele e incluso han jugado al Monopoli. Los últimos whatsapp que tengo de ellos son de que se quieren quedar aquí para siempre (yo intentaré llevármelos de vuelta a todos). 

Están alucinados con todo, dicen que tienen unas casas enormes y chulísimas y la verdad es que los chicos franceses son del mismo estilo que ellos. De momento, y cuando Laura ,la tranquilona, dé señales de vida, todo perfecto. 

Por cierto, los profes franceses dicen que les llama la atención el que nosotros somos muy cariñosos con los niños, que les damos muchos abrazos y ellos son más distantes, me verían a mí que, otra cosa no, pero de besos y abrazos los he hartado para que tenga para el finde.

Menuda experiencia más emotiva. Yo, por mi parte, orgullosa de poder ver y vivir esto con ellos y anchísima de todo el cariño que me están dando. 

Después de 14 horas de viaje y tantas emociones me voy a dormir ya. Buenas noches.